Joel 2:13 Rásguense el corazón
y no las vestiduras.
Vuélvanse al Señor su Dios,
porque él es bondadoso y compasivo,
lento para la ira y lleno de amor,
cambia de parecer y no castiga.
14 Tal vez Dios reconsidere y cambie de parecer,
y deje tras de sí una bendición.
Las ofrendas de cereales y las libaciones
son del Señor su Dios.
Dios es un Dios que se conmueve ante el arrepentimiento. Joel ha descripto el juicio que viene de una manera implacable pero hace la salvedad que si el pueblo se humilla Dios, que es bondadoso y compasivo, pronto traerá su misericordia sobre aquellos que lo buscan sinceramente. La Biblia está llena de estos eventos. El rey Acab fue un bandido, un hombre perverso pero cuando Dios emitió su juicio se humilló y vea el resultado:
1 Ry 29:27 Y sucedió que cuando Acab oyó estas palabras, rasgó sus vestidos y puso cilicio sobre su carne, ayunó, y durmió en cilicio, y anduvo humillado. 28 Entonces vino palabra de Jehová a Elías tisbita, diciendo: 29 ¿No has visto cómo Acab se ha humillado delante de mí? Pues por cuanto se ha humillado delante de mí, no traeré el mal en sus días; en los días de su hijo traeré el mal sobre su casa.
Me imagino la bronca de Elías, al menos a mi me hubiera pasado, el tipo acaba de avalar la muerte de un inocente como Nabot!!!, y Dios se conmueve por una cucharacha como Acab, porque se arrepiente!!! Pero Dios es bondadoso y compasivo.
Esto fue lo que hizo que Jonas huyera. El tenía un problema con los ninivitas, ellos habían matado, violado, arrasado la tierra de Israel y entonces cuando Dios le envía a predicarle juicio, no quiere ir… ¿Por qué?
Jonas 4:1Pero Jonás se apesadumbró en extremo, y se enojó. 2Y oró a Jehová y dijo: Ahora, oh Jehová, ¿no es esto lo que yo decía estando aún en mi tierra? Por eso me apresuré a huir a Tarsis; porque sabía yo que tú eres Dios clemente y piadoso, tardo en enojarte, y de grande misericordia, y que te arrepientes del mal.
Dios es así, perfecto en todos sus caminos. No duda un segundo cuando encuentra un corazón arrepentido. A Él no lo conmueve nuestras posturas religiosas pero cuando encuentra a alguien que esta quebrantado, no importa que sea en una cruz y a punto de morir, allí Dios lo perdona, como lo hiciera con aquel ladrón arrepentido.
David está en su momento más bajo, ha adulterado, ha mandado a asesinar a uno de sus generales, ha mentido, ha sido hipócrita y Dios lo ha confrontado y entonces… se arrepiente. ¿Qué le hace pensar que Dios va a perdonarlo? Una certeza:
Sal 51:17 Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado;
Al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios.
Como diría aquella canción: Quebranta mi corazón, quebranta mi vida, te entrego mi voluntad a ti, todo lo que soy Señor, todo cuanto tengo es tuyo. Yo quiero menguar para que crezcas Tú.
Hoy es un día para arrodillarnos ante el Dios bondadoso y compasivo. Nuestra mejor posición ante Dios es: arrepentidos. Cuando estamos arrepentidos no tenemos tiempo para juzgar a nadie, no tenemos tiempo para vanagloriarnos ante nadie, no tenemos tiempo para distraernos ante nada… estamos ante el Rey suplicando misericordia. Jesús comenzó su ministerio haciendo una convocatoria: “Arrepentíos y creed en el evangelio” y sigue haciéndolo. Dios busca gente que crea que El es bondadoso y compasivo.